Pelicano de soledades,
búho de los desiertos
ave de paraíso,
golondrina de los cerros
¡Nadie te tiene en su nido!
¡Nadie te caza al vuelo!
y te acercas a comer,
de mi palma muchas veces.
¡No te quiero de corral, domesticado y preso!
ni menos que seas un día,
¡gaviota urbana de puerto!
sabrías donde esta el mar y la comida al acecho.
sabiendo todos los rumbos,
marcando todos los tiempos.
Te quiero así como has sido,
¡ave libre de mi pueblo!
desplegando alas seguras,
¡aunque el viento sea recio!
surcando la inmensidad,
donde algunos nunca han vuelto
quizás algún día yo pueda,
dejar el temor en el suelo,
vencer el sonido y el tiempo
conquistar mi libertad...
aspirar tus mismos sueños...
y me decida a volar con mis alas a tu encuentro...
¡Quiero que emprendas el vuelo como las águilas lejos!
¡Prefiero verte volar a retenerte en el lecho!
Matando a diario tus vuelos,
podando en las noches tus sueños
deseoso de partir y con tus alas ligero
agudeza en la mirada y seguro de su acierto
La presa viva en la boca
¡Cuál trofeo de ave en vuelo!