25 de junio de 2008

Cuando calla la calle

A menudo no sé diferenciar

entre las calles pobres de un pueblo

y los pobres pueblos de las calles

a veces veo en las calles

callados ricos vestidos de harapos

y pobres en las calles con riquezas a gritos

pobre el pueblo que calle

en sus calles la pobreza

y pobre la calle que calle al pueblo pobre.

18 de junio de 2008

Después






















Después de tu voz colgada de tiempos
y un largo oído atento, quise salir
nadie era preciso a mi lado, caminé sola
para dar cabida a razones que no diría si fueras a mi lado.
Extensas sábanas de silvestres flores
que nunca vi en otros inviernos, cubrían las veredas.

Levanté recuerdos como guirnaldas
ordenados en segunderos de litio.
La mirada de recónditos suspiros.
aprisiona un beso en tu boca desierta
y mi mano colgada en el bies y deseos
convierte mis ojos en espejos.

Invité a caminar a mi lado hormigas
después de pisarlas, nadie quiso unírseme
mala costumbre vivir a ras de suelo.
Miré golondrinas de alas leves
y mi largos sollozos apresuraron huidas.

Después de tu voz suspendida en silencios
secando todo, barriendo todo
no tengo imágenes de espera
ni pasos de cercanía
estoy como vasija perfumada pero sin esencia
caminando en sentido contrario a las agujas
para encontrar alguna huella de amor en mí
y se han evaporados todas.

16 de junio de 2008

Sospechas






















Sospecho que algunos caminos tienen de polvorientos
las sobras que van floreciendo en nuestros bolsillos
y de lodo algunas lágrimas vertidas, delante de quienes nos ofrecen pañuelos
pero estarían más contentos si dejáramos de llorar.
Más de alguien me han hecho derramar algunas que no merecía.
Pero olvídalo, dejé en algún lugar escondido, para que no rodees y escapes
una daga generosa, acerada de odios, que de seguro ya te ha cortado la risa.
Tenemos de olvidos, todas las lluvias que alcancen en esta mirada de aguacero
y de consuelo, el saber que la mano crucificada, derrama ecos que oímos
al bajar por algún camino desechado tardíamente.
Yo no sé si ustedes abanican sobre si, los mismos miedos falsos
que en vez de pausarnos la vida, dejan que ella se deslice a nuestras espaldas
para no tener que decir, esperen voy cansada sin ayuda.
Sospecho también que juntamos sendas de escorias
para venderlas como recuerdos valiosos
las mismas que acechan como trancas en ventanas de luz
para no salir, para no buscar y descubrir que aligeramos la carga sin ellas.

Pero cuando más sospecho es cuando dejo de sospechar
viendo que mis caravanas viajan en fila pero sin rumbo
para no tener que contar a algunos que voy sin brújula
y llegar al lugar que no sé si me encamino bien
porque es seguro que entre señales externas
he indicado rutas que nunca están de acuerdo con mis sospechas eternas
pero permito que otros crean que voy bien, sólo porque me ven avanzar decidida.
Y es que no me importa, volver al cruce mil veces para comenzar otra vez.
Sospecho que será mi vagar, largo y lleno de nuevas pupilas
para terminar un día, recostada inerte en una loza que huele a flores
segura sólo de largas y dulces despedidas.

9 de junio de 2008

Déficit Atencional

















Intentaré escribir más largo, más líneas
para ver si así, no se escapa el verso que algunos quieren leer.
Lo intento, pero no puedo, se me van las palabras
las ideas vienen y van
a veces me distraigo sobre los techos verdes y oxidados
viendo correr gatos tras gorriones
y eso hace que me evada.
Pienso en los gatos y miro gorriones
hasta que alguna paloma me haga pensar en otra cosa.
Existen más pájaros, pero no vuelan a menudo sobre mi patio.
Me distrae la vida que vive sobre mi cercanía
la brisa golpeando ramas me hace soñar
doblego las manos para continuar
las miro y ya me fui otra vez.
Someto los dedos al teclado
y el olor a café me saca del tema.
Casi siempre estoy atenta al viento
y al ruido de bocinas lejanas
pienso en las calles de Buenos Aires
donde quiero ir y comprar un disco de Gardel
pero no tengo como viajar
un poeta loco me pregunta por msn -¿cuánto cuesta
el pasaje?- para invitarme a follar seguro-
-me río y le digo -poeta califa y viejo, déjame crear-
Prosigo, y ese rayo de sol que da justo sobre el monitor
me hace cerrar las cortinas, volví a irme.
Un verso se acaba de montar en esa nube blanda
dulce nube, se cruza con otra negra sobre el cerro
ese cerro desmayado de viñas y neblina.
vuelvo a repetir el tema
The blower\'s daughter
llevo unas mil veces repitiéndolo.

Mil días necesito para escribir sobre este tema del tiempo
tiempo en cada cosa que miro y me distrae
porque toda va en el ahora y en el ver que pasa.
Ya sé, me sacaré los ojos para no vivir en las cosas que veo
sin dejar de ir a otras vidas, en tejados
en nubes errantes o en temas musicales

¿Entienden ahora por qué en general escribo poemas cortos?




Piececitos de cartón




















Ni de niños, ni azulosos, piececitos de cartón.

7 de junio de 2008

Cansancio

La noche nos recuerda que somos finitos en acciones
medidos en fuerzas, arrendatarios de humanidad diminuta
y en equipaje de vida, tan sólo un suspiro.


Sylvia Rojas P.

Despertar






















Un sudor de acantilados profundos
resbalan en precipitados cuerpos
voy rendida a tus deseos
como leño danzando al fuego.

Tengo una calentura eterna
en esta imagen de mujer fea.
Pero esparciré bellezas
cuando te sienta en el lecho.

Desperté al amor otra vez
amigos yo les confieso
si me acobarda el amor
es porque yo soy de fuego.


Sylvia Rojas P.

5 de junio de 2008

De charcos y vida






















De tierra húmeda se forja lo que llaman boca
de tierra fértil lo que llaman matriz
de lodo resbaloso la conciencia
y de barro, barro, el corazón.
Todo lo creó el polvo
y todo lo borrará el polvo también.

3 de junio de 2008

Cuerpos bajo el sol















Ondean colgados nuestros miedos
secándose algunos antes de tiempo
otros siguen eternamente mojados
con lágrimas de hombres enanos.

Hay sombras de manchas izadas al viento
todas al son del que toca la comparsa.
Todos quisimos estar limpios de polvo y paja.
pero la mugre contamina las patas del buey.

Antes no hacía falta lavarnos
sólo comenzábamos cada día de nuevo
o nos sentábamos largas horas mirando pasar
nuestras aguas bajo el puente.

2 de junio de 2008

Vidas paralelas





















Nos delatamos, llevábamos tan a flor de piel nuestras vidas
cabían todos nuestros sueños en una maleta de mala muerte
que siempre olvidamos poner la clave en la cerradura.
Ahora no sabemos como ordenar los recuerdos
no sé cuales son los tuyos o los míos.
porque no sabía que habían tantas otras memorias en ti
y miles durmiendo en mí.

Sylvia Rojas P.